lunes, 22 de enero de 2007

“Conozco a las de tu clase”



Autor: Fer

Hace algún tiempo el escribir esta frase en un post en el siempre pacífico tablón de Nalgadas y Azotes me valió el enfado de una spankee que fue muy activa durante unos meses y luego desapareció como por arte de magia. A esta spankee habitualmente tan bromista la frase le sentó muy mal.

Por supuesto que le pedí disculpas ya que yo utilizaba la frase en un contexto jocoso, al cual ella era muy adepta, pero, como pasa con la comunicación vía internet, la falta de los elementos que hacen tan rica la comunicación cara a cara como es el tono del discurso, el lenguaje no verbal y el contexto temporal de la conversación, hizo que a ella le sonara como algo muy duro.

A pesar de este pequeño incidente, superado en su día, incorporé de forma muy decidida esta frase a mi repertorio spankístico. En algunas ocasiones la frase completa que he pronunciado es “¡Conozco a las de tu clase y sé cómo tratarlas!”. Te puedes representar perfectamente el tono. Por suerte en el contexto de la comunicación spanker-spankee no ha habido malas interpretaciones, diría que todo lo contrario ya que la frase ha servido para escenificar mejor el juego, proporcionándole un tono de regaño bien dosificado e incluso de amenaza y determinación. Lo que puede seguir a esta frase sé que te lo imaginas perfectamente.

He leído alguna frase similar en ingles del tipo: A naughty girl? Well, we sure know how to deal with that. Pero creo que el castellano es más cortante que el inglés y la frase de la que te cuento resulta más impactante en nuestra lengua. Lo ideal, claro está es que venga seguida de una fuerte serie de azotes a la infractora sobre mis rodillas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Cómo no se le ocurriría contestarte que ella también conocía a los de la tuya...?

¿Dónde irán a parar "las Flores de un día", esos spankos que llegan, saludan y desaparecen?
A lo peor hay un grupo que no conocemos y donde se refugian.

Besos

Anónimo dijo...

Me queda por saber si existen o no distintas clases de spankees, y cuál es la forma específica de tratar a cada una de ellas.
Mientras no lo averigüe no podré usar una frase tan hermosa y categórica con un mínimo de propiedad.
Por lo pronto parece que -a partir de la experiencia de Fer- existen dos clases de spankees: las que se enojan y las que no se enojan cuando uno les dice que conoce a qué clase pertenecen.

Anónimo dijo...

Muchas gracias una de tantas y Vitabar por vuestros comentarios. La respuesta que tú sugieres, una de tantas, no está nada mal y pertenece a la tipología de spankee-desafiante-que-luego-recibe-más-y-más-azotes, una variedad muy interesante.
Vitabar, tu punto de vista es muy científico, pero lo mejor del método científico es la experimentación y, ya se sabe, contra más casos, mejor.

Anónimo dijo...

Lo pones de una forma tan poética que ya hasta me dan ganas de escuchar la famosa frase en mis oiditos, como que los azotes cobran sentido jajaja.

Yo por mi parte no conosco bien a las de "mi" clase y menos a los de la "tuya" sólo una cosa sé, cuando mi spanker me regaña, una muletilla así hace la diferencia, no la voy a decir por que me da verguenza jijiji, en fin, ante la diferencias de clases, sólo es buena la integración.

Un Beso a Todos

Spankadistancia

Anónimo dijo...

Ya he vuelto a las andadas verbales en los tablones, creo que exagero un poco con mi papel de spanker-carca-estricto-chapado-a-la-antigua, he aquí (esta vez) la manzana de la discordia:

El tanga es inadmisible ya que es una prenda de niñas descocadas, lo correcto son braguitas blancas, completas, de discreto algodón y como mucho, la de los domingos, con un minúsculo lacito rosa o en canalé.
La culotte, siempre y cuando cumpla con los cánones de decencia, honestidad y modestia requeridos en una spankee, se podría llegar a aceptar, el tanga nunca: es de golfas.