jueves, 16 de agosto de 2007

Promesas incumplidas




¿Hay algo más terrible que una promesa incumplida?

Los psicólogos infantiles recalcan a los padres que cuando prometan algo a sus hijos lo cumplan, sea bueno o malo, sea premio o castigo. ¿Por qué? Porque si no lo hacen perderán credibilidad ante ellos.

Personalmente me ha pasado algo similar en mi rol de spankee, al escuchar amenazas de parte del spanker:

“Ya verás cuando lleguemos a la casa”
“Dejar las verduras en el plato no está bien. Ya te enseñaré a comer correctamente, aunque sea con azotes”
“Si no dejas ya mismo de beber alcohol, te castigaré delante de todos”
“Esa contestación sólo ha agregado 20 azotes a tu castigo”
“Anotaré esa falta a tu lista de impertinencias”
“Te lo advierto: otra tontería como esta y sentirás estallar mi cinto contra tu culo”

Y como esas podría agregar mil más, pero seguramente el lector lo hará por mí.

No hay cosa que más me excite y me prepare para el juego, que el oír amenazas. Escuchar la voz del spanker detrás de mí, susurrándome o hablándome con voz recia, firme, mientras me promete un castigo diciéndome que me azotará con más o menos rigor, hace trabajar mis neuronas y pone en funcionamiento el primer órgano sexual: el cerebro. Eso si está junto a mí, pero esta situación también puede darse por medio de mails, llamadas u otro tipo de comunicación, donde se va previendo u organizando un próximo encuentro:

“Te aconsejo que no agregues más castigos a los que ya te has ganado”
“Mano, cinto, paleta, vara mojada… Continúa con esa arrogante actitud y seguiremos sumando azotes e instrumentos a nuestro encuentro”
“Prepárate para la azotaína más humillante que hayas tenido”
“Sería bueno para tu culo que no sigas tensando mi paciencia”
“De acuerdo. No serán 100, sino 120 los azotes que recibirás. ¿O prefieres que sean 150?”

No sé que les pasará o qué pensarán las demás spankees, pero a mí, particularmente, me excita, hace que mi imaginación se libere y cree en mi mente lo que pueden llegar a ser falsas expectativas, porque pueden pasar dos cosas: que el spanker cumpla sus promesas o, más probablemente y por el motivo que sea, puede que no haga nada.

Si cumple lo que prometió, como debería ser, entonces más vale que vaya preparando varios paños tibios para ponerme en la cola, además de la crema anti-inflamatoria, masajes, saltitos y súplicas. Pero un spanker “enojado” no oirá ruegos, ni súplicas, ni lo conmoverán mis llantos, ni habrá razones valederas para que se detenga, excepto la pronunciación de la palabra clave.

También está la posibilidad más segura: que no haga nada incumpliendo sus promesas. Y allí mi mundo se vendrá abajo, desmoronándose como un castillo de naipes. Todo lo que me había imaginado, las fantasías que había tenido, las ilusiones, las ideas y la visión de lo que pasaría y que había acrecentado mi morbo por días… desaparece. Entonces viene la frustración, las preguntas como “¿qué habrá pasado para que no me azotara como prometió tantas veces?”

Pero trataré de ser justa: aquí no sólo los spankers no cumplen sus promesas a las spankees, aquí también aparecen las spankees que luego de comportarse como la perfecta mujer traviesa, contestataria, desobediente, rebelde… La que luego de azuzar y provocar al spanker, de pedir a gritos una o mil azotaínas, llegado el momento de la verdad, se niegan a ser azotadas. ¿Por qué? porque tienen un compromiso con otro hombre, porque están temerosas de lo que les pueda ocurrir, porque les da vergüenza y no están dispuestas a que el spanker las vea sin bragas… o por otras razones que seguramente habrá.

La únicas razones que yo aceptaría para cancelar una sesión, sería que no nos conociéramos y al momento de vernos y charlar, uno o ambos sintiéramos que no hay química entre nosotros o que el estado de ánimo que tengamos en ese momento no nos permita jugar.

¿Y qué sucede cuando algo así ocurre? ¿Qué consecuencias tiene el hecho de que una u otra parte no haya cumplido con su promesa? Pues es muy simple: pierde credibilidad. Y si yo no le creo al spanker sus amenazas, ¿qué gracia, qué sentido tiene? Si el spanker sabe que soy pura boca, que sólo provoco, pero que al momento de la verdad no acepto ser nalgueada, dejará de buscarme para jugar.

Así que me atrevo a sugerirles a los spankers, hombres y mujeres, que no prometan ni amenacen con algo que no piensan hacer, que no prometan lo que no van a cumplir porque están poniendo en juego su palabra y su credibilidad. Lo mismo va para las y los spankees: no provoquen la ira del spanker si después no van a aceptar o soportar el castigo.

Con eso los spankers evitaremos que se corra el rumor de que son “blandos” y las spankees “calienta-braguetas”, como calificó a algunas mujeres un querido spanker.

Antes de retirarme hago una pregunta a los lectores: ¿Cómo eres tú? ¿Cumples tus promesas o “reculas en chancletas” como decimos en mi país, o sea, das marcha atrás en tus decisiones?

martes, 7 de agosto de 2007

El spanking tiene cara de mujer

Autor: Vitabar


El spanking es una actividad llena de contradicciones. La más notoria de ellas es la que sufren las spankees, que quieren, pero no quieren (¡pero quieren!) ser castigadas. Sobre esta contradicción se ha escrito bastante acá o allá, sobre todo por parte de algunas spankees que intentan, sin éxito, que uno las entienda.


Una contradicción sobre la que se escribe menos es aquella que afecta a los spankers, quienes parecen (parecemos) disfrutar muchísimo sintiéndose la parte dominante del asunto, cuando en realidad ese dominio es una pura ilusión y son en realidad ellas quienes en verdad deciden qué y cuánto pasa.


Ambas contradicciones son, sin embargo, resolubles, al menos para quienes decidan no auto engañarse.


Pero existe una contradicción que es más básica y que no tiene solución, ya que se debe a cuestiones corporales elementales La misma podría enunciarse, desde el punto de vista spanker, de la siguiente manera: es imposible poder contemplar, a la vez, las nalgas que uno azota y las expresiones de placer y dolor que tales azotes provocan.


Desde el punto de vista spankee las cosas quizá sean aun peores, impedidas de contemplar no solo los gestos de quien las azota, sino ni siquiera el brazo que las golpea.


Tal vez para algunos este dilema pueda sonar banal o menor, pero para mí es verdaderamente un problema, porque ver las nalgas de la spankee enrojecerse es lo único que disfruto más que ver sus gestos y expresiones mientras se enrojecen, y no poder hacer las dos cosas al mismo tiempo me resulta de lo más frustrante.


Es verdad que un espejo adecuadamente ubicado mejoraría las cosas, pero seguramente provocaría una importante pérdida de espontaneidad, ya que habría que estar permanentemente cuidando donde uno se ubica, sin contar los preparativos previos de colocación de el o los espejos. Demasiado artificial.


Tampoco abogo por posturas complicadas y antinaturales, ya que es en las posiciones clásicas (otk, echada sobre la cama, bend over, etc.) cuando el spanking da todo de si. Otras variantes me parecen expresiones decadentes de spankos ya aburridos de todo. Formas spankas de buscarle tres pies al gato. Las posiciones clásicas por algo son clásicas, y en ellas la cara no se ve.


La importancia de la "cuestión de los gestos" está incluso siendo reconocida por la industria del cine. Ya he visto varios clips en los que la escena es filmada desde atrás de la spankee y luego reproducida íntegramente mostrando su cara durante el castigo. El cine podría (con el recurso del montaje) mostrar ambos puntos de vista sino simultáneamente, al menos de manera alternada. Después de todo esa multiplicidad de puntos de vista es lo propio del cine. Según creo haber leído en algún lado, se llama a eso "montaje objetivo", por oposición a una "cámara subjetiva" que sería aquella que muestra exclusivamente el punto de vista de un personaje. Los videos a los que me refiero hacen una cámara más o menos subjetiva desde la óptica del spanker (o sea, centrada en las nalgas) en la primera mitad de la película, y otra cámara subjetiva en la segunda mitad, centrada en la posición que le hubiera gustado tener al spanker para observar los gestos de su víctima mientras la azotaba. Solo unos genios del cine podrían haber expresado con un recurso tan simple esta contradicción fundamental del spanking, esta especie de esquizofrenia en la que vivimos sumidos.


Y es que los gestos son de verdad importantes. Podría decirse: "dime que cara pones mientras te azotan y te diré que spankee eres". Sin pretender dar una lista abarcativa, algunas tipologías podrían ser los siguientes:

La que está pensando en otra cosa.



No habla muy bien del spanker de turno que la spankee apenas se entere de lo que pasa. Y menos aún cuando ella pone esa cara de infinito aburrimiento, como en la foto que acompaña estas líneas. Seguramente se trata de un spanker novato, temeroso de provocar más daño del deseado, o de una spankee a quien ya nada conmueve. En todo caso, no parece una situación muy reconfortante que ella esté repasando la lista del supermercado (o reflexionando sobre las grandes interrogantes de la filosofía contemporánea) mientras la zurran. Al menos que finja un poco, que el pobre hombre necesita estímulos.

La que se ríe.

Hay gente que no se toma nada en serio. Y hay gente a quien los nervios le provocan ataques de risa. Para el spanker esta actitud no deja de ser una provocación que debiera llevarle a redoblar sus esfuerzos. Aunque otra posibilidad es abandonar toda pretensión disciplinaria y entrar definitivamente en un spanking juguetón y pachanguero, preludio de otras diversiones.

La que pone cara de "soy dura y me la banco".

En estos casos juega mucho el orgullo. Una spankee que se respete no puede empezar a chillar como una descosida en las primeras de cambio. Pero hay quienes hacen de su resistencia una cuestión de honor. Las cosas suelen acabar siendo una competencia en las que el spanker intenta provocar alguna reacción visible o al menos audible (gemidos, gritos, llantos, lo que sea) mientras la spankee trata de evitarlos. Ganamos nosotros, casi siempre.

La que pelea y patalea,


Este es el caso de quienes descubren en mal momento que la cosa duele más de la cuenta, y pretenden –a veces con aceptable sinceridad y las más de las veces sin ella- que termine de una vez. Es el estadio posterior al momento en que a la spankee se le cruza por la cabeza el siguiente pensamiento: "¿¡como carajo me metí en esto?!". La rebeldía, sin embargo, suele funcionar como un estímulo para los buenos spankers. Pero en el caso de spankers de carácter débil –como yo mismo, para poner el ejemplo que tengo más a mano- seguramente el asunto termine con la siguiente frase: "bueno, si te ponés así mejor lo dejamos…"

La que grita y se queja.


Los gritos quizá tengan un efecto catártico. Una especie de liberación del alma que ayude a soportar estoicamente el dolor. En todo caso, es algo muy grato de escuchar y le sirven a uno para medir la intensidad de su tarea. De hecho, la spankee que grita (o al menos se queja de manera evidente) es la que entra en comunicación con su spanker de manera mas franca. Claro que tiene el inconveniente de que se despiertan los vecinos, pero allá ellos.

La "pobrecita de mi".
Spankee autocompasiva que pretende inspirar lástima. Quizá alguna en realidad sienta lástima de sí misma, pero en general se trata apenas de una artimaña. Es difícil no dejarse manipular por esta este tipo de spankees, pero conviene siempre tener presente que en realidad solo quieren asegurarse una buena dosis de mimos "post-paliza".

La llorona.

Las lágrimas son toda una fantasía y en el tablón se habla con frecuencia de ellas. Creo que es una fantasía generalizada de ambas partes: azotar hasta que llore, ser azotada hasta llorar. Pero hay quien opina –quizá con más realismo- que cuando las lágrimas aparecen es porque se han superado límites que mejor no pasar. Claro que tratándose de spankees no se puede estar seguro, ya que las hay de lágrima fácil. En esos casos, la "llorona" es apenas un caso extremo de la "pobrecita de mi".

La que goza
y disfruta.

Se ha afirmado que no es posible llegar al orgasmo solo con azotes. A mi me consta que hay spankees que sí pueden (¿o solo fingía, quien sabe con que oscuro objetivo?). Las reacciones en los spankers pueden ser contradictorias. Por un lado hay una gran gratificación en hacer gozar y cuanto más mejor. Por otro lado, cualquier fantasía disciplinaria se va al mismísimo carajo, cosa que quizá a algunos les disguste.

En realidad, supongo que las mismas spankees pasan por distintos de estos tipos en distintos momentos, incluso en la misma sesión, según como la misma evolucione.

Yo no lo sé, porque todo esto es teoría pura y nada se basa en mi experiencia. Es que cuando pongo –literalmente- manos a la obra sus expresiones no las veo y no me entero de nada.


domingo, 5 de agosto de 2007

Azotes, sentido del humor y creatividad. Nos merecemos un Día Mundial












Autor: Fer




Con motivo de la posibilidad de consolidar el Día Mundial del Sapanking escribo para tí este artículo, o post como algunos prefieren llamarlo, que es ¡nada menos! que el número 400 de este blog.



La idea del Día Mundial del Spanking viene de bastante lejos y es algo lleno de sentido del humor y creatividad. Hace ya bastante tiempo Amadeo Pellegrini propuso en un artículo publicado en este blog titulado El Secreto de los Alquimistas utilizar la salamandra como emblema (¿o mascota?) del spanking, de los spankos.



Tiempo atrás, en agosto del año pasado, Ana K. Blanco, propuso en un comentario recogido en un artículo aparecido en este mismo blog el institucionalizar el 8 de agosto como Día Mundial del Spanking, por la forma de los números 8/8 y a semejanza del 24/7 o según los anglosajones que gustan de hacer las cosas al revés el 7/24 del bdsm. Este año, de forma más decidida, Ana K. Blanco ha insistido en el tema con un divertido y a la vez razonado artículo. Con tan buena fortuna que el artículo ha sido reproducido en los blogs más importantes y ágiles de azotes en español.
Intentamos reflejar en las ilustraciones de este artículo esta beneficiosa lluvia de creatividad, entusiasmo y humor.



Como si esto fuese poco, muchos de los blogueros, incluido un servidor de las monjas, hemos hecho nuestros pequeños intentos de diseño muchos de ellos como el de Selene, Vitabar y Cometospk de muy buen gusto, para celebrar ese día. También otros amigos y blogueros, seguro que me descuido a alguno, se han sumado a la celebración como por ejemplo Azotador. Fuera de los blogs, pero muy cerca de nuestro mundo, Chise ha sido otro de los puntales de esta especie de divertida y espero que efectiva campaña. Pero lo mejor del asunto es que un diseñador gráfico de profesión, Gran Dogon, nos envió un logo estupendo que es el que, por consenso, ha sido aprobado y está siendo lanzado como emblema para el Día Mundial del Spanking. En los grupos de Yahoo la idea ya está teniendo eco...

Esperamos seguir riendo y disfrutando de nuestras fantasías, de nuestra felicidad y de nuestra sacrosanta libertad sexual.


Todo esto parte de la ironía, de la risa, del humor y tal vez llegue muy lejos. Así se escribe la historia.

viernes, 3 de agosto de 2007

8/8 - Día Mundial del Spanking


Autora: Ana K. Blanco

Seguramente muchos de ustedes se preguntarán de dónde salió esto de que el 8 de agosto sea el día mundial del spanking, o quién decidió que así fuera. Bueno, la verdad es que el año pasado hablando con el prestigioso editor de este blog, mi querido amigo Fer, pensamos que sería lindo tener un día mundial del spanking, y como el 8 es un número que se asemeja mucho a un par de nalgas, pensamos el día 8 del mes 8 sería la mejor fecha de festejar.

Ahora, de cómo lo festeje cada uno, ya corre por cuenta de la imaginación y las ganas que tenga cada spanko. Quizás los amantes del spanking disciplinario rezongarán más que nunca, seguirán tratando (casi seguro que inútilmente) de corregir por medio de azotes y castigos a cada una de sus pupilas, mandándolas al rincón, poniéndolas sobre sus rodillas o mandándolas que se pongan con sus culitos en pompa para azotarlas debidamente. Los gustosos del spanking erótico, buscarán la forma de encontrar algún defecto castigable en su spankee para tener la excusa perfecta para lograr sus propósitos, o sea azotar debidamente a la/el spankee y poder terminar la sesión con sexo del mejor. También conozco a más de un/una spanker que no necesita razón para azotar a la/el spankee, porque lo hacen como una manera de demostrar su afecto, su cariño por la otra persona y que la azotaína se convierta en algo disfrutable y gozoso para ambos.

Reiteraré una pregunta que hice en el 2006: ¿Qué le regalarías a tu spanker o a tu spankee para celebrar este día?

El año pasado le regalé a mi spanker un paddle acolchado relleno de plumas para nuestras sesiones, pero ¿pueden creer que no le gustó? Es más: se enojó y me castigó. O sea que logré mi objetivo: que me azotara para festejar el día de esta pasión que nos une, porque somos las dos caras de una misma medalla: el spanking.

Así que, queridos amigos, los invito a disfrutar un día de spanking, cada uno a su manera, cada uno “a su aire” como dicen en algunos países. Pásenlo de maravilla y luego cuenten su experiencia. Saludos para todos los lectores de este estupendo blog.

jueves, 2 de agosto de 2007

Mary Jane Spiderman es spankee?

Autor: Fer

Esta chica, Mary Jane la novia de Spiderman, lo parece pero ¿lo es?

Azotes de pin up Gretchen Mol




Autor: Fer

Parodiando a nuestra querida Bettie Page, la actriz nacida en Connecticut en 1972, Gretchen Mol, interpreta una pin up azotófila que no era otra que nuestra alocada Bettie en la película The Notorious Bertie Page, aún no estrenada en España.

Como sabes, en todos los blogs de azotes le tenemos un especial cariño a Bettie Page, uno de los grandes iconos del spanking. En este blog le hemos dedicado algunos artículos:

Más sobre Bettie Page
Clip de azotes de Bettie Page
Otra gran Bettie, esta vez Bettie Page

Dita Von Teese y los azotes matrimoniales


Autor: Fer


Esta artista jovencita es la ex-señora de Marilyn Manson, también conocido como Don Brian Hugh Warner. Dita declara haber jugado, con mucho provecho, a los azotes con su antiguo maridito. Este señor, dicho con todos los respetos, es raro hasta para ser spanko.



Dita Von Teese
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Dita Von Teese
Dita Von Teese (nacida con el nombre de Heather Renée Sweet el 28 de septiembre de 1972 en Rochester, Michigan, Estados Unidos) es una modelo erótica y artista burlesque estadounidense.
Teniendo una tendencia fascinante hacia el cine clásico de los años 1940, ha hecho de su imagen un sinónimo de glamour. Desde muy pequeña estuvo encantada con las estrellas de la Edad de Oro del cine y pasó su infancia soñando en el glamour de las celebridades, como Betty Grable y Hedy Lamarr. Y no era de esperarse que con el paso del tiempo se haya convertido en la mayor estrella del cine burlesco y una glamourosa mujer.
A los 12 años se mudó a Orange County, California con sus padres y sus dos hermanas. Pasó años estudiando el ballet. Al crecer se pasó coleccionando ropa de los años 1920, su fascinación, principalmente iba hacia la lencería. Después de un tiempo compró un corsé, algo que realmente ella deseaba.
En 1991 vio una imagen de Bettie Page y dispuso utilizar la misma elegancia para posar en varias revistas. Su comparación con Bettie Page ha hecho que apareciera en gran cantidad de revistas. Ha aparecido en las portadas de Maxim, GQ, The Arena, Esquire, Elle y muchas más.
Su carrera burlesca comenzó en 1993 como un hobby coleccionando revistas para hombres de los años 30 y 40, cuando comenzó a hacer tributos a las mejores modelos de aquellos tiempos. Pronto se volvió una actriz fetichista.
Durante el éxito de Dita en Hollywood, Hugh Hefner puso los ojos en ella al ponerla en la portada de la revista Playboy.
El 3 de diciembre de 2005 contrajo matrimonio con Marilyn Manson en un castillo en Irlanda, la ceremonia fue oficiada por el escritor, dramaturgo, cineasta (y un largo etc.) Alejandro Jodorowsky. Tras un año de matrimonio, en Enero de 2007 solicitó el divorcio.

Enlaces externos [editar]
Página oficial de Dita von Teese
Dita Von Teese en Internet Movie Database (en inglés)
(en francés) Dita von Teese
Obtenido de "http://es.wikipedia.org/wiki/Dita_Von_Teese"