domingo, 21 de octubre de 2012

Cuentitos para spankees (aportación gavi)





6 comentarios:

rams de M dijo...

ilusionada esperando los cuentos que van con cada imagen, gracias!

gavi dijo...

Me da mucho gusto que haya vuelto en serio! :D

amigospanko dijo...

gavi la petición clara y diáfana "...esperando los cuentos..." me suena mucho a que la principal destinataria eres tú, la gran seleccionadora de dibujos y revolucionaria de este blog. Creo que rams de M te lo solicita de una manera más delicada, suave y dulce de lo que puede llegar a pedir el Editor Jefe. Como "conozco a las de tu clase" te diré en mi descargo que yo ya escribí muchos "cuentos" como el de la periodista rebelde, ahora te toca a ti...

rams de M dijo...

jijiji efectivamente... quise ser sutil en mi solicitud. Pero ya es segunda vez que me vengo a echar un ojito por si aparecen los cuentitos mencionados en el titulo d elo publicado con dibujos
¿Alguna solución señor Editor Jefe? ;)

gavi dijo...

Uf, bueno, muy a web aquí va mi cuentito sobre el dibujo piratas.

La coqueta y mustia Gigi fue secuestrada nada menos por el terrorífico pirata Jack Sparrow, al cual por cierto se le olvidó que tenía mujer!! -ay que ser wey eh?-
Gigi lanzó sus infalibles coqueteos al capitán, con la esperanza de poderlo convencer, disuadir, seducir o qué sé yo, para que la dejara ir.
La mujer del capitán era nada menos que su degunda de abordo, que no perdió detalle de cada coqueteo lanzado a su macho, y el buche se le fue llenando de piedritas hasta que dijo ¡¡basta!!
Pidió a algunos de sus hombres que le trajeran a vieja esa que no tenía temor del diablo... y que ya traída, la ataran de espaldas a un mástil.
Una vez hecho esto, en medio de gritos de auxilio y lloriqueos de Gigi, la segunda de abordo rápidamente le desnudó las nalgas, a la vista de todo el que quisiera, y con la espada plana le dio unos cuantos millones de azotes, hasta que el culo le quedó rojo y brillante como una manzana, y la pobre Gigi lloró a gritos.
El capitán, viendo las barbas de su vecino recortar, puso las suyas a remojar y fue directo a su mujer, aplaudiendo, todo amoroso, la desatinadísima conducta de su mujer.
Ganas no le faltaron a la segunda de abordo de hacer lo mismo con su viejo, pero le ganaron las de co..... ejem... de fo.... uf... bue... de eso a su hombre, cosa que hizo de forma ipsofacta.
¿Por qué se habrá calentado la pirata? No tengo la más mínima pajolera idea!!!
FIN

rams de M dijo...

jajaja buen relato, graciass