sábado, 26 de junio de 2010

La espera


Autor: Fer

La espera forma parte del spanking porque el spanking es ritmo, el spanking es la terca matemática de los azotes cayendo rítmicos sobre la parte más redonda de la anatomía humana.

La spankee espera los azotes, estos segundos de espera que se convierten en eternos para ella, forman parte del juego. Las palabras no se entenderían sin el silencio. Y los azotes no se entenderían sin sus pausas, sin sus tiempos muertos, sin un ritmo que a veces cambia.

Pero hay otras esperas que se hacen eternas. La del spanker que luego de largos chats ha concretado con la spankee los detalles de una primera sesión y ésta va a tener lugar muchos y largos días después, esto más que una espera es una agonía. Sin embargo si el spanker vence esta primera sensación y se centra en el deleite de una nalgas dispuestas para ser azotadas, aunque la satisfacción quede aplazada días… u horas, el spanker puede llegar a disfrutar de esta realidad anticipada. Es cierto que a veces por problemas de agenda de uno u otro integrante de esta singular pareja de baile, la fiesta se aplaza. Qué dolor!

¿Y la espera entre una primera sesión y la siguiente? ¿Qué me dices de esta espera? Una segunda sesión no tiene el aderezo y el encanto de un primer encuentro. La maldición bajo dichos como “nunca segundas partes fueron buenas” se cierne sobre la modesta segunda sesión. Sin embargo la confianza puede haber comenzado a surgir entre spanker y spankee y la tensión de la primera vez puede haber desaparecido. Esta espera es más incierta.

También está la espera de que las marcas desaparezcan, especialmente si hay un novio o marido observador de la epidermis de su querida mujercita o noviecita… Las marcas desaparecen tomándose su tiempo. Hay que esperar. A veces el que espera desespera, como dice la frase hecha. Pero también la espera es parte del juego.

6 comentarios:

amigospanko dijo...

Si alguien tiene algunas vivencias sobre estas u otras esperas relacionadas con los azotes, está cordialmente invitado/a a comentarlas aquí. Sería una gran aportación a esta reflexión.
Quedo a la espera...

Anónimo dijo...

si muchos años de mi vida pense que alguien, iba a entender, lo que yo esperaba, pero no fué así y quenes lo entendian sólo me utilizarón como un expectador, para ver que? NADIE me comprendio, y hoy veo este mundo como ausente, al menos aunque lo comprendo yo, auusente paradojicamente para mi, gracias por leer. y adios

Anónimo dijo...

Bueno, de todas la peor para mi fue hasta ahora la de esperar que las marcas desaparecieran. Cuando el que está a mi lado me dijo "pruébate este vestido..."el corazón se me puso de corbata y tomé conciencia de los riesgos en un segundo. Eso sí, las nalgas más suaves del mundo con tanto masaje de thrombocid.

No me agobian las otras esperas, supongo que porque dada mi vida son inevitables. Y a veces me producen momentos muy excitantes.

Y bueno, esperar que quien está cerca de ti comparta tus gustos...si las cosas se hablan se ve en seguida si te entienden y comparten o no. Y si no es así ya no hay nada que esperar, sólo decidir cómo encajas la situación.

Yo spankee dijo...

Me encantó la manera en que expresas la emoción que embarga tanto a spankee como a spanker... Por un lado me gusta conocer lo que corroe al spanker... el que está ansioso también por el encuentro, por la situación... pero siempre con el control en sus manos... y la spankee que muere de curiosidad mezclada con miedo y excitación....

En lo personal me encanta sentir la maraña de emociones que suben y bajan dentro de mí al saber que habré de recibir un castigo... y lo he dicho en otras ocasiones... si el spank solo fueran golpes no habría sentido en todo esto... lo que gozamos es lo que envuelve... las respiraciones agitadas, las miradas, los gestos de ambos participantes... la confianza a ojos cerrados y la intimidad que todo esto requiere...

La complicidad y el eco que hacen el tic tac del reloj al unísono de los latidos del corazón... Ah!

Sin duda alguna la espera es parte fundamental de la atmósfera spankeril...

Gracias por el post... me gustó mucho.

Saludos.

Anónimo dijo...

morrendo de inveja porque não tem nenhum blog ou Link de Portugal ou Brasil.


Snif....


mas aqui é um encanto..


muito emocionante...

Héctor dijo...

Ya he descubierto la historia de la chica de la foto. Acaba de despedirse de su novio casto y formal, que está en el metro y espera a que éste desaparezca. Entonces irá corriendo a casa, donde se quitará los vaqueros y el tanga, y buscará en el armario sus más bonitas bragas de cintura ancha y una falda ni muy larga ni muy corta.
Después llamará a su otro novio, el perverso, y esperará.