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| cherry mistress |
Cuando vi esta imagen, inmediatamente pensé, que el texto
lo habría escrito un experimentado spanker, pero luego dudé, porque también podría haber sido elaborado por una spankee, cansada de que su compañero no azotase la
zona adecuada.
Creo que la mayoría de los spankos tenemos
sentimientos encontrados sobre el dolor, no nos consideramos masoquistas, pero
nos gusta el placer que los azotes nos proporcionan, a veces imaginándolos más
que sintiéndolos. Nos excitamos viéndonos las marcas, se nos pone la piel de
gallina cuando un leve roce en el trasero nos recuerda lo que ha pasado, y si
sufrimos pero a la vez disfrutamos y una pícara sonrisa se nos escapa al tener
que sentarnos, es que los azotes habrán sido muy bien repartidos, en la zona que
indica la fotografía.
El placer que me da mi pseudo masoquismo se limita a las nalgas, en las piernas ya no, y un golpe dado en los muslos ya no es una nalgada. Para mi los muslos están fuera del límite.
ResponderEliminarNo sé quien hizo ese dibujo, pero en mi opinión está completamente equivocado(a) En los muslos ¡Nada!
Yo también prefiero las nalgas. Y en los testículos con mucha suavidad...
ResponderEliminarBueno gavi, la verdad es que en los muslos es bastante doloroso, a mi realmente tampoco me gustan demasiado pero alguno para recordarte que no te cubras o no patalees, tengo que reconocer que me excitan bastante.
ResponderEliminarUn besito
Rafaelo!! En los testículos?? Aunque sean suavitos eso tiene que doler!!
Un besote mi valiente amigo
q pensais yo pieso en el las nalgas y ya esta ai no duele mucho
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