sábado, 29 de octubre de 2005

Apuntes sobre la disciplina doméstica


Autora: María

Este artículo intenta explorar en forma general algunos aspectos de la disciplina doméstica, y especialmente el spanking (o las nalgadas o azotes) como formas catalizadoras de una relación. Es un tema complicado ya que mucha gente no comparte la perspectiva que se plantea pero debe ser entendida como una extensión de la fantasía: la idea de que lo que sucede es real, como pudo haber sucedido a principios del siglo pasado. Por eso el aviso (anuncio) de las camisas van heusen, que representa al hombre y mujer que espontáneamente resolvían sus dificultades con unos buenos chirlos en la cola.

En primer lugar conviene aclarar que siempre nos referimos a la disciplina doméstica entendida exclusivamente como la práctica llevada a cabo por una pareja de adultos que comparten una relación de pareja (esposo/esposa, novio/novia, etc.) Es muy difícil, dadas las características de la misma, que pueda darse en un contexto de spanking "casual" o de poca regularidad. De allí en adelante no hay reglas pero sí un montón de cuestiones que son compartidas por mucha gente alrededor del mundo. Para poder llegar a esta práctica la pareja debe llegar a un alto nivel de intimidad y conocimiento mutuo ya que se necesitará de mucha más confianza que lo habitual. Las cuestiones que se resuelven son "domésticas". El top de la relación (ya sea hombre o mujer) tiene determinadas atribuciones y poderes que deberá usar razonablemente. El spankee por su parte pierde algunos privilegios como por ejemplo la palabra de seguridad. El castigo empezará y terminará cuando el top lo decida y de la manera que él lo disponga. La idea (la fantasía si se quiere) en la relación de dd es que se trata de un castigo real por motivos reales. Lo cual no significa que el spanker deba ser un tirano con el comportamiento del spankee ni que el spankee no pueda moverse ni medio metro sin infringir una regla. En la práctica todo se da mucho más naturalmente. Partiendo de la base que ambos en la relación son spankos y buscan lo mismo. La palabra buscar es fundamental. No quiere decir que ambos "disfrutan" permanentemente de la práctica porque creo que hay un momento de la paliza en que lo que sucede es otra cosa.

La seriedad del juego

Este juego debe tomarse en serio porque de otra manera no funciona. Esto no quiere decir que la pareja no se divierta permanentemente con los tires y alfojes de costumbre. Los spankees sabemos que es un juego, intuimos que eso es lo que queremos. A veces lo sospechamos... otras directamente no tenemos ni una pista de por qué actuamos como actuamos. Pero la fantasía es vivir la relación de spanking sin armar previamente ninguna escena. Para esto las reglas claras es un elemento importante; la mujer sabe que al marido le molesta que diga o haga tal cosa. Tiene tiempo para medir la situación y evitarla y sin embargo decide correr el riesgo. En una relación común eso llevaría a una discusión, en una de disciplina doméstica ella sabe que será castigada por eso. La ventaja de la última es que una vez resuelto el tema quedará olvidado, después de todo ella recibió lo que merecía. La disciplina doméstica repite algunas cuestiones de algunas películas de spanking donde el hombre serio y razonable ponía a la mujer malcriada sobre las rodillas para darle unas nalgadas. Claro que ella puede ser mucho más malcriada de lo esperable y eso puede costarle la introducción del cepillo, la cuchara de madera, el cinturón o cualquier otro implemento que se les ocurra. Ahora para que el castigo sea realmente efectivo y no haya que llegar a mayores la mujer debe poder llegar a un punto en que se somete a las circunstancias. De lo contrario lo único que logrará es que le duela mucho la cola. Para eso es fundamental que el spanker asuma su rol más pleno y haga que ella tome conciencia de por qué está siendo castigada. Un par de retos es fundamental para eso. Sé que muchas mujeres podemos llorar durante una paliza y no es precisamente porque nos pegan muy fuerte.

Desobediencia y consistencia

Viviendo en una relación de dd es probable que el spankee sea deliberadamente desobediente y molesto para atraer un castigo. Esto es algo que el spanker debe esperar y saber cómo manejar. Es muy importante cuando alguien tiene tales atribuciones (decidir cuándo y por qué castigar a alguien) que sea consistente con la disciplina y no le quite importancia al tema. Es cierto que puede estar cansado o realmente con planes de hacer otra cosa: en ese caso debe hablarlo claramente, decir que tal o cual comportamiento no pasó inadvertido y que será tratado de tal manera en tal momento. Lo más seguro es que el spankee siga con su comportamiento, después de todo a veces no es algo que haga voluntariamente ni que pueda apagar pulsando un botón. La verdad es que no lo puede evitar... entonces, sigue con el mal comportamiento porque una amenaza no fue suficiente. Creo que el spanker debe tomar cartas en el asunto ya que tiene mil maneras de cortar un mal comportamiento en poco tiempo y sin mayores complicaciones (unos cuantos golpes con el cepillo o con la vara dejarán el asunto de lado). Si realmente no pudiera hacerse cargo del asunto en ese momento supongo que ella tendrá que ser lo suficientemente razonable como para entenderlo. Hay otros castigos además de los azotes como por ejemplo el rincón. Y puede haber algunos otros (que no me gustan ni me da la imaginación para ellos pero cada pareja es un mundo de reglas propias). Por último se sabe que las parejas que están metidas
hasta la nariz en este tipo de relaciones se excitan monumentalmente con los azotes así que es muy probable que durante el sexo haya azotes sin ningún motivo (o con un motivo sacado de la galera) tanto como que haya sexo después de un castigo real. Acá los teóricos americanos de la disciplina doméstica no van a coincidir conmigo. ¿Cómo vas a tener sexo? ¡Es un castigo! Y sí... Pero créanme tener o no tener sexo no le quita validez, ni status y hay conductas que realmente cambian. Claro que a veces lo que es exclusivamente necesario son los azotes y después de eso nada más que portarse bien. Más aburrido pero sumamente efectivo para el caso.

domingo, 23 de octubre de 2005

Abundando sobre los sentimientos


Autora: Rams

Hola, soy RAMS y como gordita me he sentido bastante identificada con el artículo de Ana Karen, y me invitó al ver mi foto a expresarme también.

La incomodidad es la sensación más generalizada de que recuerdo desde muy niña; ejemplos como que los adultos siempre me ponían tiernos motes por mi aspecto, a la vez que estaban prestos a criticar toda cosa que me llevara a la boca en una fiesta de cumpleaños… Dicen que hubo un periodo de mi infancia en que no era una simpática bolita rosada, pero al parecer a medida que mi altura se estancaba en los años los malditos kilitos seguían aumentando. En la familia todos éramos redondos, así que la dieta era desagradable. De lunes a viernes “por salud” comíamos pasto (verduras), combinaciones no muy sabrosas, proteicas y bajas en calorías. Yo añoraba el fin de semana del pago en que el almuerzo incluía tallarines con queso rallado, un auténtico manjar con cero vegetales, de postre, dulces y helados ¡que momentos más deliciosos! Después había que volver a la crema de acelga con pescado de tarro ¡puaj! Reconozco que soy mañosa en mis preferencias culinarias, sin embargo esa NO es la causa de mi obesidad. Para descubrirlo tuve que irme de la casa materna, hacerme cargo de mi alimentación, y verificar que no bajaba ni un mísero gramo al mes. Puedo decir ahora claramente que es un cosa proveniente de la sikis, algo independiente de lo que indicaran los nutricionistas, endocrinólogos, diabetologos, ginecólogos, exámenes de tolerancia, hormona, herencia…

Simplemente tengo asociada en mi mente el acto de comer al de recibir cariño. Por lo tanto cualquier paso en falso, que me privara de esta forma especial de sentir caricias, desmoronaba la torre construida con tantos esfuerzos deportivos o negarme a ricos comestibles. Dicho de otro modo: ante las emociones mi respuesta siempre fue zamparme algo, como festejo y/o como consuelo; sin masticar quedaba huérfana de afectos, sola, con la dicha - o - con la desgracia que estimulara mis sentires. Aquí veo una analogía muy similar al tema spank, puesto que los azotes que recibo (o doy) son a la vez reemplazos de los abrazos que no llegan, los mendigados mimos desaparecidos-perdidos en el angustiante pasado infantil. De alguna manera la idea de que un chocolate era mi mejor amigo no es tan ridícula. ¡Si hasta sale en revistas médicas de mi época!

Vivir asumiendo que eres diferente, rara, “freak”, que ninguna otra chica sueña con nalgadas, príncipes con látigos o con festines a la romana es una carga demasiado pesada cuando se llega a adolescente y se supone que debes conquistarte un sitio en el que te acepten socialmente. La belleza empieza a ser más importante, estar de moda, encajar en el ambiente; el ser la guatona creaba literalmente una barrera de carne entre los posibles jovenzuelos que aspiraran a hacerme la corte. Mi gordura me protegía, los panes y los caramelos consumidos ansiosamente y a escondidas, eran mis escudos. Me defendían de conversar en público, de compartir mis extrañas ideas (spank y más), resguardaban mi timidez, me ayudaban a parecer más una bebota graciosa que una mujer en ciernes.

¿Pueden notar el ciclo? -> Emoción (miedo) + aislamiento (nadie me acoge) + privación (social) = reacción (auto-acariñarme) + cuidarme (acompañarme con comida) + aislamiento (privación de permiso para quererme). A mi juicio las consecuencias de pueden ser percibidas aplicando la misma fórmula tanto en las azotainas buscadas como en la ingesta descontrolada de lo que sea vía bucal, hipodérmica, anal… etc. Las personas obesas compensamos las carencias atiborrándonos de placeres que impliquen un poco de distanciamiento del sujeto que nos pretende regalar su amor, como evitando con la masa grasosa que se nos puedan acercar mucho al alma “eso puede dañar”, pensamos. Autoestima baja, culpas, autocompasión, frustración, llantos contenidos y gritos reprimidos que parecen eternamente agolparse dentro, se sofocan con la dulzura de un pastel, se ahogan en un café, se esfuman en un cigarro. Diferentes vicios aparentemente inocuos que toman rumbos de escape a través de lo spank. En ese entorno se vuelven castigables, entonces se justifica el comportamiento, a veces se reafirma la sensación “beneficiosa” de estar entradita en carnes. A mi me sucedió algo mejor, maravilloso si se quiere, las azotainas disciplinarias (y conversadas previamente en tono muy grato) me permitieron empezar a dar pasos importantes hacia el quererme, y quererme lo suficiente como para despedirme de la costumbre de comerme las emociones en sanguches con queso. Digo con orgullo que llevo más de dos meses sin echarme al buche ninguna sustancia realmente peligrosa para mi salud. Cierto que las amenazas muy reales para mi epidermis tuvieron su cuota de importancia inicial, la certeza de 100 correazos por cada salida de libreto era suficientemente doloroso como disuasivo. Opino en esto diferente que Ana Karen: se puede cortar el círculo de la obesidad con voluntad, amen de los consabidos ejercicios y lechugazos. Espero dar pruebas de ello el 2006.

jueves, 20 de octubre de 2005

Sentimientos de una spankee obesa


Autora: Ana K. Blanco

Estimado Señor Diez:

La que suscribe, Ana Karen Blanco, mujer “entradita en carnes” o “gordita” como tú llamas a las de mi condición, quiere dar su punto de vista en este tema que le interesa y que conoce desde cortísima edad.

Es verdad eso de que la lucha contra la obesidad es una guerra, más que sin cuartel yo diría que sin treguas. Es una batalla diaria contra una enfermedad incurable que nos acecha 24 horas al día y que muchas veces nos camina por arriba y vence en muchas de esas batallas.

La palabra fácil no existe en nuestro vocabulario. Durante toda nuestra vida debemos convivir con esta enfermedad que, aunque muchas veces no sabemos cómo enfrentar, sufrimos sus consecuencias y vemos en nuestro cuerpo y en nuestra mente las cicatrices que nos va dejando.

Cuando en algún momento de nuestra vida nos preguntamos: ¿porqué justo a mí me tocó ser gorda?, debemos aceptar que quizás sea por herencia (padre, madre, u otro familiar). También debería aceptar que el cuerpo que tengo es el que me tocó, y que si tengo caderas anchas, por mucho que baje de peso seguiré teniendo las caderas anchas y se me achicará el resto del cuerpo.

Aceptar el propio cuerpo es algo difícil de lograr porque siempre querré ser más baja o más alta, o con las piernas así y las caderas asá y el busto de fulanita. Claro que esto no nos pasa solo a las gordas, sino a la mayoría de las mujeres, porque pasa por la aceptación del cuerpo y la valoración de uno mismo como persona y ser humano. El querer cambiar nuestro aspecto y nuestro cuerpo no es patrimonio ni privilegio de las gordas; también las flacas, pequeñas y grandes entran en este renglón. Pero ese es otro tema.

Yo creo que las dietas sí surgen efecto. Cualquier dieta que hagamos, más allá de los estragos que pueda ocasionar en nuestro organismo, nos hará bajar de peso. El problema no es bajar de peso sino mantener ese peso que hemos logrado. Entonces, ¿cuál es el secreto? Para mí, el secreto radica en los cambios que yo logre hacer: deberé cambiar mi forma de alimentarme y lograr hacerlo de forma sana y saludable, aumentar la actividad física o al menos comenzar a moverme más, pero también será importante cambiar la forma de comer y la actitud que tenga frente a la comida.

Veré los resultados con cualquier cambio que haga, pero… ¿podré sostener estos cambios en el tiempo? Eso es lo que quizás no comprendan las personas que no sufren esta enfermedad. Más de un flaco me ha dicho a lo largo de mi vida: “Pero ¡no es tan difícil! ¡Haz como yo, deja de comer lo que te engorda y ya!”. Ojalá fuera tan fácil, pero para nosotras no lo es. Si lo fuera, no existirían personas obesas en el mundo. Esta enfermedad es recuperable, pero no se cura. Como en una guerra continua, si uno deja descuidado cualquier flanco, pues por allí se meterá el enemigo. Hay que estar alerta en forma continua, sin bajar los brazos ni descuidar ningún frente, de lo contrario ese descuido nos puede costar 2 o 3 kilos.

Así y todo, hay personas que encuentran bellas nuestras redondeces. No es posible que solo los pintores de hace varios siglos vieran hermosas a las mujeres con unos kilos de más: ¿quién se atreve a negar la belleza de “Las Tres Gracias” de Rubens? Y hoy en día, hay artistas como Botero quien se deleita pintando y esculpiendo figuras de personas obesas y además… ¡las encuentra bellas!

Hoy en día, con la medicina basada en la evidencia, internet y los medios de comunicación, tenemos la posibilidad de estar más informados. Siglas como IMC (Índice de Masa Corporal), ICC (Índice Cintura Cadera), las 5 cifras de la salud (valor del colesterol, triglicéridos, glucosa, presión arterial y medida de cintura), tenemos más posibilidades de lograr un peso adecuado y mantenerlo por medio de una dieta saludable y SOSTENIBLE en el tiempo. Coincido totalmente que la dieta tipo Mediterráneo es la mejor, con una distribución de las comidas hecha en 6 veces en el día para lograr una curva de glucosa pareja. Una dieta así seguramente será la más acertada, y no lo digo como profesional pues no lo soy, simplemente hablo como gorda y lo digo por experiencia propia, pues yo logré bajar 37 kilos y sostenerlos durante años, sin dejar de comer lo que me gusta pero sí cambiando la cantidad, calidad y frecuencia de los alimentos que me consumo.

Ahora quiero llegar al punto que me movió a escribir esta opinión: la baja autoestima y la desvalorización. Todo un tema que también lo he vivido en carne propia y que lo viven muchas mujeres: gordas, anoréxicas o con peso normal, porque esta problemática no pasa por el peso sino por la actitud. Pero hablaré específicamente de las gorditas, o mejor dicho, hablaré de mí y mis sentimientos, y quizá alguna de las lectoras se verán reflejadas en mí como en un espejo.

A pesar del título quiero aclarar que no soy spankee todavía, pero sí soy obesa. Nunca llegué a tener obesidad mórbida, pero sí llegué a pesar 130 kilos (IMC grado 4) y la autoestima de la gente hiperobesa como yo es bajísima. ¡Hubo veces que me sentí con la autoestima tan baja que me podría haber tenido la altura de un sobre y pasado por debajo de una puerta!

Quizás fue por mi desvalorización y mi baja autoestima que como mujer obesa me entregué de la forma más absoluta y total a mi pareja. Como me sentía mal y me veía peor, quise quizás agradecer y no perder a esa persona que estaba conmigo y fui capaz de hacer muchas cosas para no perderlo, para que no me dejara, aunque por supuesto que en ese momento yo no me daba cuenta que era así. Entonces me convertí en una leona en la cama, amando y entregándome de manera tal que el hombre que estaba a mi lado no se fijara tanto en mi cuerpo sino en mi calidad amatoria. La que no perdonaba el estar obesa era yo, no él.

Hoy en día, el que me ve caminar por la calle, manejando el personal, tratando con diferentes personas, vendiendo y promocionando mi producto o llevando las riendas de mi negocio, lo que menos se imaginaría es que a veces resurge algún momento de desvalorización o de baja autoestima por mi obesidad. Me ven firme y segura, pero no siempre es así, aunque nadie lo sabe excepto yo.

En conclusión, mi querido Señor Diez y amigos de este blog, quería decirles que la parte emocional de la obesidad es todo un tema, y la entrega total (a veces no deseada) es el precio que pagamos las gordas para que el otro acepte nuestro cuerpo... y lo digo con lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta!

Claro que con el correr de los años he aprendido que para que el otro me acepte primero me tengo que aceptar a mí misma, y en la medida en que yo lo haga también lo harán los demás.

Lo que todavía me cuesta es que me vean con poca ropa o sin ella, porque la guerra contra la obesidad ha dejado en mi cuerpo y en mi alma, cicatrices que recién hoy estoy aprendiendo a amar, porque son mis “medallas al mérito” en esta guerra de batallas diarias.

A los queridos hombres que también son obesos creo que se habrán sentido identificados en más de un párrafo. Es que más allá del sexo, la enfermedad y los sentimientos son similares. Y cuando escribía esto también pensaba en ustedes.

Un fuerte abrazo para cada uno de los lectores de este fabuloso blog!

Ana Karen (anakaren810 arroba yahoo.com.ar)

Elegir pareja de juego


Autora: María Tersuer

La mayoría de las personas que nos sentimos atraídas por este mundo de los azotes, quisiéramos encontrar a nuestra media naranja dentro de este mundillo. Muchos lo han conseguido, ya siendo su pareja (amigo/a marido/mujer Amo/sumisa etc.) ¿Pero qué pasa con las personas que no tienen pareja o que sí la tienen pero no comparten el gusto por las nalgadas?

En el caso de parejas de hecho que no comparten el gusto de las nalgadas (siempre hablando desde mi punto de vista) se pueden dar múltiples casos, tantos como parejas hay, pero lo más “normal” son dos o tres situaciones:

La primera y, no por eso más habitual o corriente, o normal, sería que una parte le contara sus gustos a la otra, con lo cual pueden ocurrir dos cosas, una que la otra parte ponga el grito en el cielo, que no lo entienda, que se rasgue las vestiduras, que tache de loco/a al otro, que le ponga las maletas en el rellano, etc. La segunda opción que se puede dar es que la parte de la pareja que no comparte sus gustos ceda de vez en cuando a jugar al juego del otro, haciendo un pequeño o gran sacrificio, según los ojos de cada cual y, poco a poco ir cogiendo gustillo al juego, o jugar a cambio de algún tipo de gratificación.

En ambos casos se podría dar, de hecho se da en gran parte de ellos, que la persona interesada en estos temillas de dar o recibir calor en la parte donde la espalda pierde su glorioso nombre, es una persona afín a sus gustos.

Otra opción que se da y que sería ideal es que las parejas compartieran los gustos en todo, pero eso no es lo más habitual, lo cual lleva en muchos casos a buscar gente afín a nuestras perversiones.

Ahora a través de Internet, lo tenemos mucho más fácil que nuestros predecesores, detrás de las pantallas nos sinceramos, nos abrimos, no vemos a la otra persona y al principio, cada cual se hace una imagen de cómo es esa persona que te lee en la distancia, casi siempre al gusto y semejanza de uno mismo. Hasta que se decide dar el gran paso y salir del anonimato y de la protección que te da una pantalla y un teclado… y allí es donde viene la prueba de fuego, que es ni más ni menos, no compartir los gustos de cómo, cuánto, en qué postura, que intensidad, ni la tonalidad de color te gusta que te dejen el culo (los spankees claro), todo eso se supone que se ha hablado con la persona que te vas a encontrar… La prueba de fuego es que en verdad conectes con esa persona y, un café, un rato de charla, o simplemente a primera vista ya es un paso para ver si conectas o no. Lo ideal sería que ambos conectaran, tuvieran simbiosis y que se formara una pareja para jugar, pero no todo es jauja y puede ocurrir que si, que en la red se conecte muy bien, pero en la realidad sea otra cosa bien distinta.

Hay muchos factores que pueden hacer que rechaces a una persona para ser tu partenaire en este mundillo. Hablaré siempre bajo mi punto de vista, que no por ello es el mejor, ni tampoco el peor, simplemente es el mío. A mi lo que me lleva a rechazar a una persona para ser mi spanker, no es el aspecto físico, bueno en realidad, tengo que tener una cierta atracción por él, gustarme en su conjunto, no necesariamente tiene que ser alto, delgado y guapo, sino que puede ser un chico con unos cuantos kilos de más y no ser un Adonis precisamente, puesto que yo disto mucho de ser una modelo de alta costura.

Lo que me llega a rechazar, ojo no siempre he sido yo la que he rechazado a alguien, sino que muchas veces me han rechazado a mi sea por el motivo que sea… bueno, como iba diciendo, una de las cosas que me llevan a rechazar a un posible candidato a calentar mi muslamen, es que en nuestro encuentro, cuando estamos conversando me relate todas y cada una de sus conquistas, que si la niña esta muy buena, que si tenia el culo ummm que maravilla de culo, que si era un bombón, que me estén hablando de sus conquistas anteriores y posteriores; ojo no quiero un sexsymbol en el mundo del spank, quiero a alguien que comparta mis gustos y que sienta deseos de castigarme en cierto modo y yo sentir deseos de ser castigada por él.

La distancia física entre nosotros no es un handicap para mí, hombre si es de mi misma ciudad o de los alrededores pues mejor que mejor, pero si está lejos, y no podríamos vernos con la frecuencia que quisiéramos pero si nos sintiéramos que tenemos mucho feeling, no me importaría tener encuentros esporádicos, para mí bien vale la pena esperar, si la dicha es buena. Así que por eso puede pasar por delante de muchos un spanker que viva a cientos de kilómetros de mí antes que uno que viva al lado si no es de mi gusto.

Así que espero algún día mi partenaire en estos juegos… pero siendo como soy de exigente creo que no me va a ser tarea fácil.

Etiquetas: Elegir a tu azotador no siempre es fácil solo hay que ver el físico

28/09/2005 16:02. Tema: Azotes. Enlace de este artículo (pincha o copialo). .
Hay 12 comentario/s de este artículo.

Luis:
Hola Ter:
me gustaría tener un contacto contigo para ver si hay compatibilidad, yo soy de la zona de Madrid, contéstame!!
Salu2
2005.09.28 19:07 email: azotron (arroba) yahoo.es

Maria:
Hola Luis, te contesto jajaja... como te pones asi, cualquiera no.
Yo soy de la zona de Barcelona.
Salu3 ale yo mas
2005.09.28 23:04 email: tersuer2001 (arroba) yahoo.es

El Silencio del Azote:
La dinámica Spanking requiere de elementos comunicativos más sutiles y basados en la certeza recíproca que en otro tipo de relaciones. Matiz intuitivo, el cual deseo aclarar : no me refiero a que el caudal comunicacional deba ser más intenso, más claro, o más fluido que en cualquier otro tipo de relaciones entre los seres humanos. No. Me refiero al hecho de que pueda establecerse de antemano un territorio común de anhelos, de deseos, de cauces, de medios y de Niveles Sorpresivos no plasmados.
Pongamos un ejemplo para intentar explicarme, y que no resulte tan abstracto, tan teórico :
Yo puedo atesorar la curiosidad de sentir cómo puede reaccionar mi pareja Spankee ante la prueba de un Azote "Sordo", con el sonido tintineante de un cascabel de acero.
2005.09.29 13:34 email: elsilenciodelazote (arroba) hotmail.com

El Silencio del Azote:
Puedo especular cuál es su umbral, su expectativa de intentar averiguar en qué consiste, en dónde se marca el límite, cuál es el grado de permisibilidad que ella me va a otorgar, que yo le doy. El impacto del sonido. El golpe sin que ella adivine la frecuencia repetitiva. El sonido del cascabel y el cambio de intensidad en el azote. Bien. Muy bien.
Pero si yo, anticipadamente, no puedo sentir, no puedo intuir, no aprecio a mi Spankee de una forma tal en la que yo sepa que "sé que ella va a ser proclive a esa experiencia, y a sus sensaciones", si yo éso no lo sé, significará que ese caudal de comunicación intuitivo no habrá funcionado como debiera.
2005.09.29 13:36 email: elsilenciodelazote (arroba) hotmail.com

Luis:
Hola Ter:
pues a ver si quedamos algún día en alguno de los 2 sitios, gracias por contestar.
Salu2 otra vez
2005.09.29 17:55 email: azotron (arroba) yahoo.es

Frank:
Ter: creo que defines muy bien las situaciones que se producen y las dificultades para encontrar pareja de juegos de confianza. También que contar con las personas que no tienen muy claro que son ni que quieren.
2005.10.01 00:50 email: mtqes (arroba) yahoo.es

Fer:
Me gusta mucho cuando alguien escribe un artículo como Ter y abre su corazón, con independencia de lo que piensen los demás, que, como decían los Mecano "lo que piensen los denás está de más"
2005.10.01 12:28 email: fer_forever (arroba) yahoo.es

fenris:
Como siempre tus comentarios son excelentes.
2005.10.01 17:42 email: sr_fenris (arroba) yahoo.es

Zorro:
Ahí esta el tema, el paso de Internet a la realidad, si ese paso cuesta lo suyo para tratar otros temas más mundanos, véase amistad, idiomas... cuanto más si lo que esta en juego es algo tan íntimo y personal como dar y recibir azotes.
2005.10.02 13:15

María:
Gracias por los comentarios, y allí está el dar el paso a la realidad, la prueba de fuego, si se necesita feeling en cosas mudanas, mucho más se necesita en algo que es más bien erótico y que no toda la sociedad lo entiende.
2005.10.02 19:56 email: tersuer2001 (arroba) yahoo.es

Fer:
Me gusta mucho cuando alguien escribe un artículo como Ter y abre su corazón, con independencia de lo que piensen los demás, que, como decían los Mecano "lo que piensen los denás está de más"
2005.10.03 19:32 email: fer_forever (arroba) yahoo.es

Karen López:
Hola a todos afortunadamente para mí, tengo a mi esposo a mi lado y juntos disfrutamos de los azotes, en nuestro caso es el "cane" o vara de rattán, la uso como preámbulo amoroso o bien con bastante severidad cuando es para castigarlo, he creado un grupo de yahoo donde he subido algunos videos donde le castigo con la vara.
Un cordial saludo y espero que pronto encuentren a su pareja ideal.
2005.10.09 23:52 email: ama_karen (arroba) yahoo.com

martes, 18 de octubre de 2005

Azotes mercenarios



Autor: Fer

También los azotes pueden ser una mercancía, estar mediatizados por el dinero, ser objeto de compra-venta.

En los pequeños anuncios aparecen de vez en cuando palabras como "spanking", "sumisa", "castigo"... también ha habido algún spanker que se ha anunciado en un tablón dedicado al spanking, cosa que ha causado un gran revuelo y bastante rechazo.

Obviamente la venta de enseres e instrumentos para azotes eróticos ocupa una gran parte de los escaparates interiores de los sex shop de cierto nivel, la venta de videos y fotos de spanking supone un negocio, no sé si floreciente o no, en Internet pero la cosa es que quien quiera fotos de una definición y calidad aceptable debe entrar a estas webs con la visa en la boca.

Nuestra común afición no podría, en modo alguno sustraerse de la lógica mercantil y a los que no hemos probado el azotar pagando o ser azotados previo paso de la visa por el terminal punto de venta, nos queda el consuelo que los azotes amateurs son siempre preferibles a los profesionales.

Curiosamente siempre buscamos la profesionalidad en todo bien o servicio, salvo en el sexo en donde la profesionalidad es como un "Plan B", en todo caso no demasiado digno.

domingo, 16 de octubre de 2005

Nueva etapa del primer blog de spanking en castellano


Autor: Fer

Juntos y con alegría iniciamos esta nueva etapa del blog, el primero en lengua castellana sobre spanking, que es tu blog.

Hemos dejado el alojamiento en Blogia, en donde ha transcurrido el primer semestre de vida de este blog, para mudarnos a Blogger... El soft de Blogia es muy sencillo y con recursos sorprendentemente buenos, pero normalmente sus servidores estaban colapsados y esto impedía a muchos amigos poder entrar al blog. Allí ha quedado el blog, con indicaciones de redireccionamiento hacia nuestro nuevo emplazamiento, esto será así mientras los de Blogia quieran tenerlo. Tenemos copias del blog antiguo tanto en pdf como en formato tipo web.

La temática y el estilo del blog continuarán siendo los mismos que en el antiguo emplazamiento. Hablaremos de azotes eróticos entre adultos previo consenso y todo lo que les rodea. Hemos trasladado el total de los contenidos, artículos, comentarios, ilustraciones, etc., del blog antiguo aquí, esta ha sido una labor de Tane a quien le damos las gracias.

Este nuevo blog tiene muchas posibilidades técnicas que aún no sabemos aprovechar. Sin embargo las dos primeras ventajas del nuevo blog: es el rápido acceso y se pueden instalar fotos de calidad superior.

Aún nos falta mudar algunas cosas como los enlaces hacia blogs, webs y grupos amigos. También aún hemos de comunicar a los amigos que nos tienen enlazados que cambien la dirección.

La nueva dirección no es tan singular como la anterior ya que este alojamiento de blogs es de Google y hay aquí millones de ellos, pero hemos querido nombrarlo con dos palabras que en el español hablado en ambos lados del Atlántico evocan nuestra afición principal y que además lo vinculan al simpático grupo de Yahoo Nalgadas y Azotes.

Nuestra idea es que este blog crezca y sea cada vez más rico, más completo y más útil. Para ello esperamos vuestros artículos, comentarios y sugerencias.

El spanking en los libros


Autor: Mkaoss (previamente publicado en el tablón Nalgadas y Azotes)

En el último libro que me he comprado, del que os daré la referencia al final, pone lo siguiente:

"Pareja abierta: basta una pizca de "spanking"

Muchas parejas viven hoy la pasión erótica fuera de la relación. Se ha hecho también a modo de "experimento intelectual", como en el caso de Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir, el filósofo y la pensadora de los años del existencialismo, que plantearon su situación de pareja como central, y alrededor otras relaciones satélite, con hombres y con mujeres....Su complicidad, literaria, política y cerebral, que les mantuvo unidos durante toda la vida sigue siendo inimitable. En efecto, solo a ella le reservaba, en sus cartas, el nombre afectuoso de "mi castor"...

La historia nos ha enseñado, además, que la practica habitual de relaciones extraconyugales incluso puede ser legitimada mediante una especie de "contrato" entre los integrantes de la pareja. Kenneth Tynan, vividor, esteta, donjuan, creador de "Oh. Calcuta, el primer musical transgresor, estableció un contrato con su mujer. Habla de ello en su libro The Diarie of Kenneth Tynan, autobiografía editada veinte años después de su muerte la pasión secreta de Kenneth era el spanking, golpear unas hermosas nalgas femeninas. Cuando su esposa Kathleen se hartó, los dos cónyuges sellaron un pacto: él le permitía tener amantes, a cambio de poder seguir practicando estos excitantes castigos corporales con Nicole, una muchacha que había conocido hacía poco .Y con ella proseguirán los experimentos: se vestirán de austeros victorianos para reprender y golpear en las nalgas a la criada (una señora con inclinaciones masoquistas....) Y, así, todos contentos.

El spanking, entre otras cosas, tiene una historia muy interesante, hábilmente explicada por la escritora Susanna Schimperna.

Ante todo, los golpes en las nalgas son una variante blanda de la fustigación, pero sin ninguna implicación sadomasoquista: en efecto, quedan excluidos la crueldad, el miedo y la sumisión. Es un montaje, una representación: él ha de ser pacífico, paternal, con autoridad; ella ha de ser caprichosa, viciosa, rebelde. Y un detalle más fascinate aún: el primer elogio de los golpes en las nalgas procede de una mujer, la aristócrata lady Hentiette Montague, que en el remoto 1786 escribe en su diario cómo debe copmportarse el amante ideal. Ha de ser atento, comprensivo, pero ¡por favor! sin esa irritante (en un hombre) sensibilidad femenina. Lady Montague fantasea también sobre los "castigos", que deberían ser provocados por causas fútiles y tontas, y ejecutados con mano ligera por un hombre huraño. ¿Y ella? Ha de fingir que se lo toma muy en serio. Así pues, los golpes en las nalgas, concluye la aristócrata y descarada señorita, pueden ser muy divertidos y extraordinariamente excitantes si se imparten y se reciben con estas premisas.

¿Resulta extraño? No tanto, si pensamos que desde la antiguedad, entre amos y criados y entre profesores y alumnos los "castigos corporales" constituían la norma. Incluso una gran historia de amor como la de Abelardo y Eloisa empezó con un golpe de puntero, el que normalmente propinaba un maestro meticuloso a una alumna apática. ¿Diriamos que el efecto erotizante del golpe fue fatal para su pasión?

Lo cierto es que el spanking, aunque con algunas variaciones, ha llegado hasta nuestos días. Sin crueldad, por supuesto; lo único esencial es, como subraya Susanna Schimperna, que el trasero se ponga morado y escueza bajo las manos del que golpea. No se exige desnudarse completamente, incluso es preferible que solo quede al descubierto la parte sometida al castigo."

Pues bien resulta que:
1º- Se empieza a hablar de spanking como una actividad más.
2º- No se conceptualiza como perversión.
3º- Se acepta como medio de comunicación en la pareja.
4º- Destaca la voluntariedad de los participantes.
5º- No hay crueldad ni sumisión.
6º- Respeta los limites y personalidades de cada cual.
7º- (Añade tú lo que quieras......yo no puedo mááásssss....)

El libro se llama LOS NUEVOS COMPORTAMIENTOS AMOROSOS, la pareja y las trasgresiones sexuales...Willy Pasini , Psiquiatra, profesor de la F. de Medicina de Milán.Edit. Ares y Mares 2.005.

El libro merece la pena, por la visión tan abierta que da de la pareja actual.